lunes, 28 de abril de 2014

Nuevo fármaco que reprime la adicción a la cocaína y las recaídas en su consumo

Un compuesto novedoso, que actúa de manera muy específica sobre un importante receptor cerebral, tiene un potente efecto contra numerosas conductas negativas asociadas a la adicción a la cocaína, incluyendo la recaída en su consumo. Al menos así se ha comprobado en experimentos con animales.

La investigación llevada a cabo por el equipo del Dr. Jun-Xu Li, de la Universidad en Buffalo (Universidad Estatal de Nueva York), Estados Unidos, proporciona fuertes evidencias de que ese compuesto podría convertirse en un nuevo fármaco para el tratamiento de la adición a la cocaína, una adicción para la cual no existe una medicación efectiva.

En el estudio, el compuesto, RO5263397, mitigó de manera notable una amplia gama de comportamientos de adicción a la cocaína.

Éste es el primer estudio sistemático que muestra de forma convincente que el RO5263397 tiene un buen potencial para tratar tal adicción.

[Img #19506]
Jun-Xu Li en su laboratorio. (Foto: UB)

La nueva investigación muestra que el receptor TAAR 1 (por las siglas de su nombre en inglés, Trace Amine Associated Receptor 1) es muy prometedor como nuevo blanco terapéutico sobre el que actuar mediante medicamentos como la sustancia probada que ayuden a desengancharse de la cocaína a los drogadictos.

TAAR 1 está muy relacionado, en lo neuroquímico y en lo anatómico, con la dopamina. Ésta es una de las sustancias fundamentales en el cerebro, y se ve involucrada en la transformación neuroquímica que conduce a la adicción a la cocaína.

Teniendo en cuenta esto, y el papel que se le atribuye de “freno” a la actividad de la dopamina, los fármacos que estimulen al TAAR 1 podrían contrarrestar la citada adicción.

En la nueva investigación, se puso a prueba esta hipótesis utilizando en animales adictos a la cocaína el RO5263397, el citado fármaco experimental que estimula a los receptores TAAR 1.

Al medir la intensidad con la que los animales estaban dispuestos a trabajar para conseguir una inyección de cocaína, los investigadores constataron que el RO5263397 redujo su motivación para ello. Este compuesto hace a las ratas menos dispuestas a trabajar por la cocaína, lo que llevó a una reducción de su uso
http://noticiasdelaciencia.com/not/10206/nuevo_farmaco_que_reprime_la_adiccion_a_la_cocaina_y_las_recaidas_en_su_consumo/.

Los cuervos comprenden las relaciones entre otros congéneres

Unos biólogos cognitivos han comprobado que los cuervos comprenden las relaciones de rango o jerarquía entre otros cuervos (quién "manda" más que quién) y son capaces de vigilar la evolución de tales relaciones, percatándose por ejemplo de un descenso o ascenso de alguien en esa jerarquía.

Tal habilidad se había visto sólo en primates. Al igual que ocurre con muchos mamíferos sociales, los cuervos entablan diferentes tipos de relaciones sociales (la existente entre amigos, la que reina entre parientes, o la que se forja al formar pareja), y también establecen estrictas relaciones jerárquicas. Desde una perspectiva cognitiva, entender las propias relaciones respecto a otros es una habilidad clave en la vida social diaria. Sin embargo, entender también las relaciones que tienen entre ellos los miembros del grupo prepara el terreno para las maniobras “políticas” (en esencia, saber quién podría apoyar a quién en caso de conflicto).

El equipo de Jorg Massen y Thomas Bugnyar, de la Universidad de Viena en Austria, comprobó que los cuervos que percibían un cambio en la jerarquía (esencialmente un individuo de rango bajo derrotando a otro de rango alto y por tanto ascendiendo en la jerarquía mientras el otro descendía), reaccionaban con sorpresa y nerviosismo.

[Img #19505]
Dos cuervos. (Foto: © Jorg J.M. Massen)

De forma parecida a los primates, los cuervos hacen un seguimiento de las relaciones de rango entre los miembros de su grupo. Pero, y esto es importante, los investigadores hallaron que los cuervos no sólo reaccionaban del modo indicado a los cambios del tipo descrito en la jerarquía de su propio grupo, sino también a aquellos del grupo vecino. Estos descubrimientos sugieren que a los cuervos les basta observar a los miembros de otro grupo para deducir las relaciones jerárquicas entre todos ellos.

Además, ésta es la primera vez que se muestra que estos animales son capaces de hacer un seguimiento de las relaciones jerárquicas entre individuos que no pertenecen a su propio grupo social.

Los cuervos superan a la mayoría de las otras especies de aves en términos de inteligencia. Su nivel de eficiencia en varias pruebas de habilidades intelectuales es similar al logrado por los simios. En un estudio anterior (http://noticiasdelaciencia.com/not/3159/), Bugnyar y sus colegas demostraron incluso que los cuervos son capaces de usar gestos al comunicarse entre ellos. Señalar con una parte del cuerpo un objeto para atraer la atención hacia él, es una habilidad natural que sólo había sido observada en las personas y en nuestros parientes evolutivos más cercanos, los simios
.http://noticiasdelaciencia.com/not/10205/los_cuervos_comprenden_las_relaciones_entre_otros_congeneres/